“Las fachadas clásicas del caserón, ubicado en un tradicional barrio porteño, quedaron intactas -dicen los arquitectos Julieta Pérez y Alejandro Amoedo, socios en Vanguarda Arquitectos-. El desafío fue respetar lo existente y el valor arquitectónico de la casa, proponiendo para su interior cambios que actualizaran la funcionalidad sin temerle a unos toques vanguardistas.
Lograr esta dualidad entre lo clásico y lo actual, sintetizándolos en un proyecto, también representa a nuestros clientes, una familia joven, activa y con valores tradicionales, en armonía con la ubicación y el espíritu de la casa.
El blanco y el negro fueron los tonos marco de un diseño vibrante, enérgico, fuerte y juvenil. Y muchos tonos oscuros contrastando con la luz, diseñan espacios con sombras y destaques. Pero siempre cuidando la armonía entre lo existente y lo nuevo. Entre la historia vivida y la historia por vivirse.

Las líneas rectas diagonales organizan el hall y el living. Las cabriadas de los espacios proyectados nuevos y los materiales tradicionales, como el hierro, con formas modernas reinventan el elemento estructural.
En la planta superior, los ambientes privados recibieron un tratamiento menos dramático. Allí, cada cuarto en suite con su baño lleva impreso el gusto y las preferencias de quien lo habita.
Todo proceso de calidad es largo y arduo -continúan los arquitectos Julieta Pérez y Alejandro Amoedo-, y el desafío a los límites no sólo es posible, sino también forma parte de la arquitectura. Todo esto debe venir acompañado por materiales y elementos confiables, proveedores en los cuales descansar, como fue el caso en esta obra, entre otros, de la cocina italiana de Uniche Design y el Dekton, provisto por Euro Stone. Productos que hacen la diferencia y que complementan magníficamente nuestro trabajo, como también el proyecto domótico integral, a cargo de Smart Home, y la increíble piscina lograda por Aquabelle.

También, materiales clásicos de primera calidad usados de manera innovadora como las columnas que se utilizaron para poner en valor la entrada, cual custodias del pasado”.